El futuro de la exploración petrolera en México debe ser de la mano de las empresas del sector privado, si es que México espera alcanzar sus metas de producción, dijeron especialistas en el sector. Foto de archivo.

Las empresas del sector privado del país hicieron un nuevo llamado al gobierno de Andrés Manuel López Obrador para que reanude las rondas de licitaciones de proyectos para explorar y extraer hidrocarburos en México.

     Durante un foro organizado en el Senado de la República, representantes de esta industria dijeron que México no podrá alcanzar sus metas de producción petrolera para 2024 si no reconsidera su negativa a la participación de capitales privados en la exploración y producción petrolera.

     López Obrador decidió suspender las llamadas rondas de licitaciones petroleras --que iniciaron en 2014, tras la reforma constitucional que puso fin al monopolio estatal en materia de hidrocarburos-- por considerar que los ganadores no habían cumplido las promesas que hicieron al obtener los contratos.

     Para el mandatario, el hecho de que solo 29 de los 111 contratos firmados por empresas y consorcios privados estén en fase de producción, es una señal inequívoca de que la reforma petrolera fue ‘sobrevendida’.

     Claro que, para los integrantes de esa industria, ese dato por sí mismo no refleja la realidad e incluso desestima que muchos de esos proyectos están en fase de exploración y pronto podrían producir, tal como prometieron en los planes que presentaron al firmar los contratos.

     El presidente “ha señalado la importancia que las empresas de hidrocarburos cumplan con sus compromisos de inversión, como ha sido el caso hasta ahora, y contribuyan con ello a incrementar la producción de hidrocarburos”, dijo Alberto de la Fuente, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos, o Amexhi, en el foro sobre exploración y producción petrolera organizado en la Cámara Alta.

     De acuerdo con cifras de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, el organismo responsable de regular la participación de empresas nacionales y extranjeras en el negocio energético mexicano, los privados terminaron octubre con una producción de 94.6 mil barriles diarios, equivalente a 5.4% del total del país, lo que implica un avance de 41.6% frente al décimo mes del año pasado. En contraste, los barriles de crudo extraídos por la empresa estatal Petróleos Mexicanos sufrieron una contracción de 5.3% con respecto a octubre de 2018.

     De ahí que Amexhi, como lo han hecho otros expertos y representantes de esa industria, pidió al gobierno que reconsidere esta alianza público-privada, porque sin ella difícilmente se alcanzarán las metas planteadas hacia 2024.

     La asociación “le permite a la empresa productiva del Estado realizar más exploración y producción de hidrocarburos compartiendo los riesgos técnicos y financieros con sus socios”, dijo De la Fuente, de Amexhi, en el foro.

      Una de las ventajas que los privados le ofrecen a Pemex al asociarse es la reducción de riesgos para los contribuyentes del país.

     “Sin la iniciativa privada. . . no se podría lograr el llegar a la meta de 2.5 millones de barriles diarios para 2024”, dijo Armando Guadiana, el senador que preside la comisión de Energía en la Cámara Alta y quien está afiliado al partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que fundó el presidente.

 

Un camino largo, no un mal negocio

Aunque algunos podrían decir que las cifras actuales de producción distan de ser envidiables, los ingresos obtenidos hasta ahora por el país mediante las regalías que pagan las empresas al Estado por explorar el suelo tampoco son poca cosa.

     Incluso, los beneficios para México pueden empezar a verse sin que las compañías hayan siquiera sacado un barril de aceite del subsuelo.

     “Cuando en una ronda se adjudica un área contractual, las empresas realizan pagos por concepto de bonos, cuotas e impuestos a la actividad de exploración y extracción de hidrocarburos, estos pagos se hacen al Estado mexicano independientemente del éxito exploratorio”, dijo el presidente de Amexhi, en la presentación de resultados de las rondas petroleras.

     De acuerdo con la CNH, las empresas privadas han invertido ya 11 mil millones de dólares y tienen planeado elevar esa cantidad hasta 37 mil millones, como parte de los compromisos que hicieron con México.

     A la fecha, esos recursos representan inversiones directas de dos mil 700 millones de dólares, pagos de mil 990 millones al Fondo Mexicano del Petróleo trasferencias por mil 671 millones de dólares a Pemex, entre otras, lo que parece un negocio positivo para la administración.

     “En este modelo el gran ganador es México, porque el estado no asume riesgos en exploración ni perdidas en ninguna circunstancia. . . la mayor parte de los ingresos que se van a estar recibiendo van al Estado mexicano sin ningún riesgo”, dijo el presidente de Amexhi.

     En la actualidad Pemex, que es la petrolera más endeudada del mundo, no cuenta con la capacidad técnica ni financiera para aventurarse en la exploración petrolera de las aguas profundas de México, y, si bien esta actividad viene con un alto riesgo asociado, expertos en el sector consideran que es fundamental para garantizar el futuro a largo plazo de la industria de hidrocarburos en México.

     “La exploración en aguas profundas tienen un papel muy importante en la reposición de reservas a largo plazo”, dijo por su parte Alejandra León, directora asociada de investigación y análisis en IHS Markit, una consultora que provee información de diversas a nivel global. “Después del 2024 si no seguiste asignando bloques a explorar, tienes un hoyo en el tiempo. . . Esta industria es de largo plazo, y lo que vas haciendo hoy a veces se refleja en cinco, en siete en ocho años”.

     La exploración en aguas profundas tarda entre seis y 10 años en reflejarse en posible producción petrolera, los riesgos asociados son muy elevados, por lo que existe una gran posibilidad de que deriven en reservas inexistentes o que no son comerciales.

     Para los especialistas, sería un error ver el lento progreso de estas inversiones como una pérdida.

     Los pozos perforados que no generan producción petrolera sí proveen al país y a los empresarios de información sobre las características de las formaciones geológicas a su alrededor, lo que reduce la incertidumbre para las próximas actividades exploratorias.

     “Un pozo que no sea comercial no significa que no sea exitoso porque ese pozo te va a dar muchísima información”, dijo Andrés Brügmann, director nacional de Fieldwood Energy, una empresa energética dedica a la exploración y producción, que está asociada en México con la firma Petrobal, de Alberto Baillères, en el foro organizado en el Senado el jueves.

     México ya ha visto fracasar algunos contratos asignados en las tres rondas de licitaciones petroleras realizadas por la CNH desde la reforma de 2014 --sin contar la ronda ceo, que fue exclusiva para Pemex.

     Tan solo a principios del pasado mes de octubre, la empresa Hokchi Energy renunció al campo que tenía derecho a explorar en aguas someras del Golfo de México, tras reconocer que los hidrocarburos encontrados no tenían valor comercial.

     En esa ocasión, quien incurrió en una pérdida por las inversiones y esfuerzos que destinó y dedicó al yacimiento fue Hokchi y no los contribuyentes mexicanos, o Pemex, como ha ocurrido en el pasado cuando la petrolera estatal fallaba en encontrar crudo donde calculó que habría.

     Pese al tropiezo, Vinicio Suro, el vicepresidente del consejo de administración para México de Hokchi, defendió la continuación de las rondas petroleras, para que las empresas privadas puedan complementar a Pemex y ayudar a que México alcance sus metas de producción petrolera.

     Suro argumentó que la colaboración con privados genera eficiencia e ingresos, lo que a su vez permite llevar a cabo más actividades de perforación que no represente el total del riesgo para Pemex y el Estado mexicano.

     “Este país debe cuidar de lo que vive, debe cuidar aquello que nos da de comer, aquello que nos sostiene”, dijo Indira Kempis Martínez, la senadora por el estado de Nuevo León, que pertenece al partido Movimiento Ciudadano, en el evento.

      López Obrador ha dicho que sostendrá más adelante un encuentro con empresarios de hidrocarburos para definir si México reanuda o no las rondas de licitaciones.

 


Fecha de publicación: 28/11/2019

Etiquetas: Petróleo Pemex Energía Hidrocarburos Exploración Producción