6 de nov. (Sentido Común) -- Emirates Airline, la línea aérea bandera de Emiratos Árabes Unidos, obtuvo el último permiso que le faltaba para comenzar a operar la ruta entre Ciudad de México y Dubái, con una polémica escala en Barcelona, a pesar del intento de Grupo AeroMéxico y otros actores vinculados que pretenden evitar la llegada de la compañía asiática.

      La aerolínea de Medio Oriente obtuvo de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), luz verde para volar a partir del 9 de diciembre diariamente entre los dos destinos bajo el cobijo de la quinta libertad aérea, que le permitirá tomar y descargar pasajeros haciendo escala en Barcelona, la segunda ciudad más importante de España, de acuerdo con un comunicado.

     “Nos complace confirmar que Emirates ha obtenido ahora el permiso para nuestro próximo vuelo entre Dubái-Ciudad de México a través de Barcelona”, dijo Salem Obaidalla, vicepresidente senior de operaciones comerciales de las Américas de Emirates, en un comunicado. “Nos gustaría expresar nuestro agradecimiento a las autoridades en México que nos han otorgado el permiso y las franjas horarias necesarias para operar nuestros vuelos”.

     Los planes de la aerolínea han continuado a pesar de resistencias de competidores, como AeroMéxico, la aerolínea bandera de México, que ha buscado detener legalmente el itinerario; la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México, que se ha posicionado públicamente contra la ruta, e incluso legisladores de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el partido en el poder, que desde su palestra instaron al poder ejecutivo a no proseguir con los permisos para el vuelo, esfuerzos que tras el reciente permiso resultaron insuficientes.

     Estos actores están en contra de los planes de Emirates ante lo que han calificado como una potencial competencia desleal --con señalamientos de supuestos subsidios gubernamentales en insumos como el combustible, teniendo su origen en un país predominantemente petrolero-- y por la prohibición a sus trabajadores de asociarse libremente para formar sindicatos.

     Claro que estos supuestos han sido rechazados por la aerolínea emiratí.

     “Emirates se gestiona comercialmente, es financieramente transparente y no recibe subsidios del gobierno, y estamos muy seguros de que nuestra nueva ruta entre Dubái y la Ciudad de México ayudará a impulsar tanto el turismo como el comercio”, agregó Obaidalla, en el comunicado.

    El permiso de la SCT se da un mes después de que el Juzgado Tercero de Distrito del Centro Auxiliar de la Primera Región, especializado en materia de Extinción de Dominio otorgó un amparo a AeroMéxico contra la prórroga a un memorándum de entendimiento formalizado a finales de 2016 entre los gobiernos de México y Emiratos Árabes Unidos, debido a que fue firmado por el entonces director general adjunto de transporte y control aeronáutico de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), un funcionario no facultado para ello.

    A pesar de haber obtenido este cobijo legal que solicitaba a las autoridades abstenerse de realizar cualquier acto en relación con el convenio de servicios aéreos entre México y Emiratos Árabes Unidos, hasta cumplir con las formalidades señaladas por el amparo, el permiso a Emirates fue otorgado.

    No es claro si el visto bueno de la SCT fue otorgado tras cumplir con las formalidades señaladas por el amparo o debido a la impugnación que dijo Emirates buscaría de esta decisión judicial.

      AeroMéxico, que desde junio opera la ruta Ciudad de México-Barcelona, fue consultado por Sentido Común para conocer su opinión sobre el permiso y la situación del amparo otorgado, pero al momento de esta publicación no ha recibido respuesta.

     Por su parte, el gremio de pilotos lamentó la decisión, señalando que va en detrimento de la aviación nacional, ya que en la ruta Dubái-México el tramo que será más redituable para la aerolínea emiratí será el Barcelona-México, un mercado que sólo debería concernir a empresas de bandera mexicana y española.

      “Los pilotos de ASPA lamentamos que las autoridades aeronáuticas de este país no consideren a la aviación nacional como una prioridad”, dijo Rafael Díaz Covarrubias, secretario general de ASPA, en un posicionamiento. “Permitir la competencia desleal que llegará con Emirates afectará las fuentes de empleo de los trabajadores mexicanos de la industria aérea que orgullosamente llevamos la bandera de nuestro país por todo el mundo”.

    La ruta operará bajo el código EK 255, llegará a México a las 16:15 horas y el vuelo de regreso, bajo el código EK 256, partirá de México a las 19:40 horas rumbo a Barcelona.

Fecha de publicación: 06/11/2019