La tasa de retención del ISR sobre el capital del ahorro pasará de 1.04 a 1.45%, según las iniciativas al paquete económico de 2020

19 de sep. (Sentido Común) -- La propuesta que hizo el gobierno de Andrés Manuel López Obrador de elevar el impuesto que deben pagar los ahorradores por los intereses que obtienen fue vista con recelo por algunos inversionistas y comentaristas, quienes ven la acción como un castigo que terminará por desalentar la cultura del ahorro en el país.

     El gobierno, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, informó que planea elevar la tasa de retención del Impuesto sobre la Renta (ISR) de 1.04 a 1.45% para el año entrante, de acuerdo con las iniciativas presentadas dentro del Paquete Económico 2020 que envió el gobierno de Andrés Manuel López Obrador al Congreso de la Unión.

     El cambio provocó inconformidad porque, desde la perspectiva de algunos y como habitualmente se dice en el país, el gobierno optó por cargar más obligaciones a los contribuyentes que ya tiene cautivos, en lugar de mejorar la recaudación y cobrar impuestos a quienes no pagan.

     “Yo entiendo la necesidad de promover un mayor crecimiento a través de un consumo sano, aun cuando el presidente diga que este ya no es su objetivo, pero es un error hacerlo con un castigo al ahorro”, escribió Sergio Sarmiento, analista político y columnista del periódico Reforma, a inicios de mes. “Poner un impuesto solo para castigar el ahorro, particularmente de los pobres, es un error. Sabemos que los fondos de pensiones no tendrán la capacidad de dar a los mexicanos un retiro digno. Castigar además el ahorro se antoja perverso”.

     No obstante, este eventual aumento en la tasa no impactará a todos los ahorradores, porque se realiza como retención y aquellos que presenten declaración anual podrán recibir un reembolso de los derechos que paguen, explicaron expertos.

      Claro que, al mismo tiempo, el cambio no dejará inmunes a todos, y los pequeños ahorradores del sector formal sí podrían resultar más afectados, de acuerdo con los analistas consultados.

     “Hay un efecto que sí afecta a los que menos ganan por este efecto”, dijo Marco Oviedo, analista del banco de inversión británico Barclays, en entrevista telefónica.

     La tasa de retención calculada para 2020 refleja el comportamiento al alza de los tipos de interés de los instrumentos financieros del país, observada durante el periodo de febrero a julio de 2019.

     Las continuas alzas en los costos de financiamiento aplicadas los últimos tres años por Banco de México, si bien derivan en mejores retornos, empujarán la tasa de gravamen a los intereses generados al ahorro en 41 puntos base.

     Esta tasa aumenta porque se espera que el rendimiento sobre capital aumente, mas no es un gravamen al ahorro y puede ser recuperado en la declaración anual. No obstante, los pequeños ahorradores no suelen realizar su declaración ya que no están obligados y sí podrían experimentar afectaciones.

     “Lo que sucede es que estas personas, con ingresos anuales menores a 400 mil pesos, a final de año no hacen este neteo, por lo que el impacto mayor sería para los pequeños ahorradores”, dijo Adrián García, investigador del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), en entrevista.

     El cambio propuesto por Hacienda y Crédito Público se traduciría en mayores ingresos para el gobierno.

     En los primeros siete meses de 2019, la recaudación del ISR tuvo un crecimiento anual nulo, al ubicarse en 1.05 billones de pesos. En julio, estos ingresos, que representan la mitad de lo que recauda el gobierno en impuestos, retrocedieron 10% en su variación anual.

     Los ingresos tributarios representan alrededor de 13% del producto interno bruto y tienen un mayor peso en el presupuesto desde que en 2005 inició la caída en la producción petrolera de Pemex.

     Para 2020, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público estima un crecimiento en los ingresos tributarios de 2% o el equivalente a 3.5 billones de pesos --que son 63.4% de los ingresos totales-- del gobierno.

      De ahí que esa propuesta, como otras incluidas en el paquete económico, buscan mejorar la capacidad recaudatoria de la administración, algo que tampoco es del todo claro.

     “Quizá no vaya a recaudar mucho, y si es así, el efecto va a ser mínimo, pero yo le daría el beneficio de la duda al gobierno”, agregó Oviedo, el economista de Barcalys.

     De acuerdo con la encuesta “Ahorro y Futuro: ¿Cómo viven los jóvenes el retiro?”, elaborada por la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro, o Amafore, 30% de los 44.1 millones de ahorradores en México guarda recursos a través de instituciones financieras, mientras que el resto utiliza esquemas informales.

     Expertos en materia de ahorro consideran que el cambio al impuesto que retenga el país no necesariamente va en contra de los usuarios que sí tienen el hábito de guardar recursos.

     “No se debe confundir ‘retención’ con ‘impuesto’. Y la retención es sobre el rendimiento. El único ingreso que se retiene y grava es el ingreso por intereses”, escribió Abraham Vela Dib, el presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro, o Consar, que es el organismo que regula el sistema de ahorros del país. “Cabe advertir que quién no la presenta [la declaración anual de impuestos], ese sí pierde”.


Fecha de publicación: 19/09/2019

Etiquetas: ahorradores impuesto intereses gobierno presupuesto