5 de ago. (Sentido Común) -- Las negociaciones que mantiene Comisión Federal de Electricidad (CFE), la compañía eléctrica estatal, con las empresas a las que el gobierno anterior contrató el transporte de gas natural mediante ductos, podrían estar ya rindiendo frutos, tras el conflicto que llevó incluso a la estatal a iniciar procesos de arbitraje en contra de sus proveedores.

     Infraestructura Energética Nova (IEnova), una empresa dedicada a desarrollar infraestructura para el sector de la energía y electricidad en México, anunció hoy que firmó un acuerdo de suspensión de plazos con CFE, lo que le permitirá evitar la terminación anticipada del contrato relacionado con el gasoducto Guaymas – El Oro, que transita a través de los estados de Sonora y Sinaloa, pero cuya operación se encuentra detenida por la inconformidad de terceros.

     “La firma del convenio de suspensión refleja el compromiso de IEnova de mantener el diálogo con el gobierno federal y la CFE para alcanzar un acuerdo satisfactorio entre las partes y continuar con la prestación del servicio de transporte de gas natural en el gasoducto Guaymas – El Oro”, dijo IEnova, en un comunicado.

     El acuerdo de suspensión permitirá a CFE y IEnova realizar las acciones necesarias para reiniciar la operación del gasoducto, que de hecho entró en operación en mayo de 2017, pero tres meses después fue detenido debido a un proceso legal promovido por uno de los ochos pueblos --Lomas de Bácum-- que conforman la Tribu Yaqui, por donde pasa la obra.

     La operación del gasoducto, de 330 kilómetros de longitud y que representó una inversión de aproximadamente 429 millones de dólares, sí tiene el respaldo de los siete pueblos yaquis restantes. Claro que el gobierno federal también está interesado en que los gasoductos se echen a andar lo antes posible, incluso Tania Ortíz Monasterio, directora general de IEnova, dijo días atrás en una llamada telefónica con inversionistas que contaba con el apoyo de México.

     El mes pasado, un juez federal radicado en el estado de Sonora ya desechó una solicitud de amparo contra el proyecto, promovido por Lomas de Bácum.

     Ahora, con el acuerdo de suspensión, las partes tendrán cuatro meses adicionales a partir del 22 de agosto, cuando IEnova cumpla dos años de haber interrumpido la operación del ducto, de 30 pulgadas y con la capacidad para transportar 510 millones de pies cúbicos diarios de gas, para intentar reiniciar sus operaciones.

     El acuerdo alcanzado es una de las primeras muestras tangibles de la sintonía que han alcanzado la filial de la estadounidense Sempra Energy y el gobierno de México, durante las negociaciones establecidas para que funcione una red de siete gasoductos construidos por diferentes compañías, pero por los que CFE quiere dejar de pagar al no recibir aún gas.

     Las negociaciones las lleva a cabo CFE con cuatro compañías --IEnova, TC Energy, Grupo Carso y Fermaca--, pero también participan el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y Consejo Mexicano de Negocios (CMN), los principales organismos empresariales, además de representantes del propio gobierno de López Obrador.

     La administración de CFE, encabezada por Manuel Bartlett, busca renegociar los términos de los contratos, que ha calificado de "leoninos y desastrosos", debido a cláusulas contractuales vinculadas a su suspensión por causas de fuerza mayor y el pago de un cargo fijo por capacidad.

     De hecho, IEnova fue emplazada formalmente hace unos días a un proceso de arbitraje por este gasoducto ubicado entre los estados de Sonora y Sinaloa, luego que semanas antes CFE diera a conocer que inició procesos similares para este y otros proyectos, un mecanismo establecido contractualmente para la solución de este tipo de conflictos.

     Las empresas argumentan que este tipo de cláusulas les permiten respaldar inversiones y concluir obras u operar los proyectos pese a causas ajenas a su actuar.

     Tanto el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, como IEnova han señalado como prioridad la puesta en marcha del gasoducto, incluso hace en un par de semanas IEnova dijo a sus inversionistas que esperaba llegar pronto a acuerdos con CFE.

     Además de este gasoducto, la empresa enfrenta un conflicto similar por el gasoducto marino Sur de Texas-Tuxpan que construyó en alianza con TC Energy, anteriormente conocida como TransCanada.

Fecha de publicación: 05/08/2019