López Obrador volvería poner a Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad al centro de la política energética del país. Foto de Pemex

31 de ago. (Dow Jones) -- El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, aplazará las subastas de nuevos bloques petroleros durante al menos dos años y planea modificar la legislación para reforzar el papel dominante de la petrolera estatal Petróleos Mexicanos, de acuerdo con dos personas con conocimiento de la situación.

La administración entrante no propondrá cambios a la Constitución, que fue enmendada en 2013 para permitir la inversión privada en petróleo y gas, pero usará su mayoría en el Congreso para modificar la ley de hidrocarburos, dijeron las personas.

Los cambios planeados permitirían a Pemex elegir socios para desarrollar reservas sin necesitar la opinión favorable de los reguladores petroleros, lo que permitiría al gobierno otorgar nuevos bloques petroleros directamente a Pemex y convertir a la petrolera en el único comercializador de petróleo producido por firmas privadas bajo contratos de producción compartida.

El gobierno también aumentará el contenido nacional requerido, como equipos y servicios, para las compañías petroleras que operan en México, agregaron estas personas.

Las medidas podrían agregar incertidumbre a los inversionistas petroleros ya que reducirían el poder regulador de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, que se estableció para supervisar el sector petrolero recientemente abierto y garantizar la igualdad de condiciones para todas las empresas.

"Si todo esto se confirma, enviaría una señal de que la continuidad de la apertura petrolera podría estar en duda", dijo Pablo Medina, analista de Welligence Energy Analytics, una firma de investigación con sede en Houston.

López Obrador, quien asumirá el cargo el 1 de diciembre, busca fortalecer a Pemex y la eléctrica estatal, CFE, volviéndolos a colocar en el centro de la política energética con más dinero y recursos.

Desde la apertura petrolera de 2013, el gobierno ha firmado 107 contratos de exploración y producción con docenas de compañías petroleras extranjeras y nacionales, aunque los primeros barriles de petróleo surgido de estos contratos no se espera hasta mediados de 2019. Pemex ha ganado 14 bloques en esas subastas, tanto con socios extranjeros como por sí mismo, y ha firmado seis empresas conjuntas.

López Obrador dijo que revisará los contratos para asegurarse de que no haya corrupción involucrada.

Algunos de sus principales colaboradores son escépticos de que las subastas petroleras estén dando frutos para México, tanto en términos de ingresos como de nuevas inversiones. No habrá nuevas subastas en los primeros dos años, ya que el gobierno revisará los resultados de las primeras licitaciones, dijeron las personas. Uno dijo que era "probable" que no se ofrezcan bloques durante todo el mandato de seis años de López Obrador.

Rocío Nahle, propuesta por López Obrador como su futura secretaria de energía y conocida por su posición como opositora a la reforma del sector, no respondió a las llamadas en busca de comentarios.

Los cambios legales significarían que la aprobación de la Comisión Nacional de Hidrocarburos no sería necesaria para otorgar directamente nuevos bloques petroleros a Pemex. Actualmente, la Comisión es efectivamente un contrapeso técnico de la firma estatal para garantizar que México maximice sus recursos y que Pemex tome decisiones basadas en motivos técnicos.

El presidente de la comisión de hidrocarburos, Juan Carlos Zepeda, se negó a comentar sobre los planes de López Obrador.

López Obrador prometió impulsar la inversión en Pemex después de tres años de recortes presupuestarios, incluidos cuatro mil millones de dólares para elevar su producción de petróleo de los actuales mil 900 millones de barriles por día y dos mil 500 millones para renovar sus seis refinerías de petróleo. También planea construir una nueva refinería en su estado natal, Tabasco.



Fecha de publicación: 31/08/2018

Etiquetas: López Obrador Pemex energía subastas